El rol de la cánula nasal de alto flujo en pacientes con EPOC
La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es una afección que limita la respiración y disminuye significativamente la calidad de vida de quienes la padecen. Aunque durante años se ha recurrido principalmente a terapias con oxígeno suplementario o ventilación no invasiva (VNI), la cánula nasal de alto flujo (CNAF) ha emergido como una herramienta terapéutica clave, especialmente en fases de agudización o como soporte respiratorio continuo.

Imagen ilustrativa.
¿Qué es la CNAF?
La cánula nasal de alto flujo es un sistema que administra oxígeno humidificado y calentado a altas velocidades, superando los 30 litros por minuto, lo que permite una mejor oxigenación y comodidad para el paciente. A diferencia del oxígeno convencional, la CNAF genera un lavado de CO₂ en el espacio muerto de las vías aéreas superiores y reduce el trabajo respiratorio.
¿Por qué es útil en pacientes con EPOC?
En pacientes con EPOC, la capacidad pulmonar está comprometida. Su respiración se vuelve ineficaz, y la retención de dióxido de carbono es común. La CNAF ha demostrado ser efectiva en varios aspectos fundamentales:
- Disminución del esfuerzo respiratorio: El flujo alto reduce la resistencia en la vía aérea superior, haciendo que la respiración sea menos laboriosa.
- Reducción del espacio muerto anatómico: Al expulsar CO₂ de la nasofaringe, mejora la eficiencia de cada respiración.
- Mejor tolerancia: Comparada con la VNI, la CNAF es más cómoda, especialmente para pacientes que no toleran bien las mascarillas o el soporte presurizado.
- Menor tasa de exacerbaciones y hospitalizaciones: El uso prolongado de CNAF en domicilio ha mostrado beneficios en pacientes con EPOC crónica, según publicaciones recientes.

¿Qué dice Fisher & Paykel?
Fisher & Paykel Healthcare, líder mundial en soluciones respiratorias, ha sido pionero en el desarrollo de sistemas de CNAF como Optiflow™. De acuerdo con su literatura clínica y estudios propios:
- “Optiflow™ ha demostrado mejorar la oxigenación, reducir la frecuencia respiratoria y aumentar la comodidad del paciente en comparación con la oxigenoterapia convencional o la VNI, particularmente en pacientes con insuficiencia respiratoria hipercápnica leve a moderada, como suele observarse en el EPOC.”
Además, sus sistemas integran humidificación activa con control preciso de temperatura y humedad, algo esencial en pacientes con mucosas secas o fragilidad bronquial, como ocurre en muchos casos de EPOC.
CNAF en escenarios agudos y crónicos
Durante exacerbaciones: En lugar de pasar directamente a la VNI, la CNAF puede ser una terapia puente eficaz, con menor riesgo de complicaciones.
En cuidados crónicos o paliativos: La comodidad del paciente se prioriza, y la CNAF permite una oxigenación eficiente sin limitar la comunicación o la alimentación oral.
Conclusión
La cánula nasal de alto flujo no es solo una alternativa, sino una opción terapéutica valiosa para mejorar la calidad de vida de los pacientes con EPOC. Con el respaldo tecnológico y clínico de empresas como Fisher & Paykel, hoy tenemos una herramienta que combina eficacia, comodidad y seguridad. A medida que más estudios avalan su uso, la CNAF se consolida como parte integral del manejo respiratorio moderno.